PANDEMONIO
LA CUESTA DE 2021
Si bien la ola de Covid-19 no se ha visto mermada en este año 2021 con la aplicación de vacunas autorizadas por la COFEPRIS, pero que abrió una pequeña ventana de esperanza, el panorama para nosotros los mexicanos es más que desalentador y no se ve una salida a corto o mediano plazo que evite la estrepitosa crisis económica que se nos viene encima.
Si bien es cierto que en México ya se aplican las vacunas, es un hecho que para que la ciudadanía sea totalmente inmunizada faltan muchos años, pues los lotes de ayuda han llegado a cuentagotas. Incluso, se ha solicitado el “apoyo” del vecino del norte para que nos comparta de sus vacunas.
El desalentador panorama para los mexicanos por la crisis de salud se agrava con el peligro económico que se viene encima y que ya se siente en los hogares por la pérdida de empleos y el aumento a los precios de la canasta básica, por lo que, los aumentos al salario mínimo siguen siendo una vacilada frente a la inflación.
Recientemente, el presidente de la asociación de dueños y permisionarios de las gasolineras en el Estado de México, Jorge Luis Pedraza, mencionaba que seguirán los aumentos en los precios de los hidrocarburos, lo que impactará directamente en los productos que más se consumen: tortillas, pan, huevo, aceite, y todos los productos de primera necesidad.
La otra noticia con la que hemos tenido que despertar es que nuestros recibos de luz presentan exorbitantes aumentos, producto de la severa crisis que atraviesa este sector a consecuencia de políticas fallidas de los gobiernos, incluido el de Andrés Manuel López Obrador, pero que tenemos que pagar todos los mexicanos.
En el primer mes de 2021, el INEGI señalaba que el Covid-19 había obligado a cerrar a miles de pequeñas y medianas empresas y que esto había tenido como consecuencia la pérdida de 647 mil empleos, de los cuales 560 mil fueron de empleos formales y 87 mil 237 eventuales.
También datos estadísticos del INEGI nos señalan que en 2019 existían 4.9 millones de pequeñas y medianas empresas; sin embargo, para el 2020 se redujeron a 3.9 millones; es decir, un millón de estos establecimientos cerraron definitivamente sus puertas y sus empleados pasaron a engrosar las listas del desempleo.
Lo que es más alarmante, l 52.4 por ciento de las personas que se quedaron sin empleo tienen enormes deudas con los bancos, con casas de empeño y hasta con prestamistas, lo que ha obligado a que recurran al comercio informal en busca de llevar sustento a sus hogares y si alcanza, abonar a sus deudas.
GRIPE
Los partidos políticos en el Estado de México siguen muy preocupados y ocupados en armar sus listas de candidatos para las diputaciones locales y presidencias municipales. Están tan absortos en su trabajo, que se han olvidado de los ciudadanos, a los que nuevamente, les tratarán de imponer personajes que simplemente no son bien vistos.
En este sentido, morena se lleva las palmas con personajes que trata de mantener por tres años más en el poder, a pesar de sus paupérrimos resultados.
Gabriela Gamboa en Metepec, Juan Rodolfo Sánchez en Toluca, Raciel Pérez en Tlalnepantla, Fernando Vilchis de Ecatepec Esperanza González por Acambay y 52 alcaldes de este instituto buscan las simpatías populares, algunos incluso disfrazados con los colores de sus aliados PT y Nueva Alianza.
En la Cámara de Diputados no cantan mal las rancheras pues 26 legisladores han dicho que van a la elección consecutiva y muchos de ellos pasaron de noche en la LX Legislatura, con un trabajo gris y de pocos resultados.
Los diputados son encabezados por el líder de la bancada, Maurilio Hernández González, en Tultitlán, Karina Labastida en Naucalpan, Mónica Álvarez por Toluca, Azucena Cisneros, en Ecatepec, por citar solamente a algunos.
Lo único cierto es que los representantes populares van a una elección sin el efecto AMLO y con el descrédito de las promesas no cumplidas, con una pobre productividad legislativa y un pueblo que comienza a cansarse porque los cambios no llegan.
NEUMONÍA
Desesperada se le ve a la alcaldesa Gabriela Gamboa allá en el municipio de Metepec, ahora que las encuestas la ponen con la espalda en la lona. Su pobre trabajo y sobre todo su falta de empatía con los ciudadanos la ponen abajo del candidato de la coalición PAN-PRI-PRD, Fernando Flores, quien por cierto, no ha escatimado en gastos para ser el próximo alcalde.
A últimas fechas Gamboa se ha dejado ver, para la foto obviamente, en sitios muy concurridos, ha recorrido calles saludando a los metepequenses y hasta ha hecho faena en las obras que puso en marcha ahora que es tiempo electoral. Dos años antes, no recibía a nadie en sus oficinas y menos salía a recabar el sentir de sus gobernados.
Gabriela Gamboa irá con los colores del PT por la elección consecutiva, en al cual deberá de vencer a Fernando Flores y a Carlos Santiago, este último bajo los colores de Movimiento Ciudadano.
En este panorama, morena y sus aliados podrían irse a la tercera o cuarta posición, pues no hay que perder de vista al PVEM, que con un trabajo callado, pero eficaz, va subiendo sus preferencias.
Lo único cierto es que Gamboa ve como le salen alas a su sueño de repetir en el municipio mexiquense que se ha convertido en uno de los principales puntos de expansión económica.