Durante la emisión de Cultura Turismo y Deporte en un Click 3.0, en su sección #COMEMtando, Luis Manuel García Peña, Director del Conservatorio de Música del Estado de México (COMEM), charló con el musicólogo Israel Cruz Olalde acerca de la primera sinfonía de México.
En la conversación, transmitida por las redes sociales de esta dependencia mexiquense, Olalde destacó información relevante de la primera sinfonía de México, que data de 1866, escrita por un compositor no mexicano, también mencionó cómo y quién la descubrió, se restauró y el proceso para rescatarla.
“Fue descubierta dentro del fondo reservado del Conservatorio en la década de 1990, en ese momento Karl Bellinghausen estuvo trabajando muchísimo sobre Tomás León y Melesio Morales que fueron compositores de esta época donde inició el proceso de la profesionalización de la música.
“Es una hipótesis realmente mía que Karl Bellinghausen, entre todos los papeles, encontró la sinfonía de Leopold J. Lángwara, austriaco, y a partir de ahí se le metió la idea de crear una historia de la música en el segundo imperio de México”, agregó el musicólogo.
Esta composición fue dedicada al emperador Maximiliano de Habsburgo y es posible que, aunque la haya recibido, no llegó a ser ejecutada.
La obra del austriaco Lángwara resulta la primera sinfonía de México, una pieza que nadie ha escuchado y que hasta la fecha sigue siendo muda.
Cruz Olalde analizó la sinfonía desenterrada y la ubica en el contexto musical e histórico, hallándole elementos de Haydn, pero con el ánimo de Beethoven y que, en cierto modo, prefigura la fluidez sinfónica de Anton Bruckner.
Finalmente, comentó que esta sinfonía es de gran importancia para el acervo musical de México, porque la obra en su forma y expresividad habla de la idealización de una sociedad filarmónica de México.