𝐏𝐨𝐫 𝐀𝐥𝐟𝐨𝐧𝐬𝐨 𝐀𝐜𝐨𝐬𝐭𝐚 𝐑𝐨𝐣𝐚𝐬
𝐋𝐎 𝐓𝐈́𝐏𝐈𝐂𝐎, 𝐃𝐄 𝐋𝐎 𝐀𝐓𝐈́𝐏𝐈𝐂𝐎
Si usted no tiene que salir de su casa en los próximos días, no salga, esta recomendación es por su bien.
E Dios Tláloc anda suelto y ha desatado toda su furia en el Valle de Toluca, regalando precipitaciones que desde hace muchas décadas no se presentaban. Algunas personas, sobre todo aquellas que tienen algún cargo político, han tomado la pablaba “atípicas” cuando sus municipios se inundan, o padecen trastornos sus vidas cotidianas.
Antes, era tan común echarle la culpa al ciudadano diciendo que su pésima cultura era la culpable, pues arrojar residuos a las coladeras era pan diario, y si bien esta mala costumbre sigue siendo habitual, lo cierto es que la mala planeación de las ciudades ha dado al traste con el alcantarillado.
Toluca, como muchas otras ciudades, ha visto crecer su mancha urbana al norte, al sur, al este y al oeste, sin una planeación estratégica, sin pensar como será la forma de conducir las aguas negras por debajo de la casas y calles.
Nadie puede dudar que el sistema de drenaje está colapsado cuando pasamos calles que arrojan agua por sus colades cual fuentes danzantes; nadie dida que las calles que anteriormente no padecían de inundaciones, ahora se anegan, o que las calles del mismo centro, donde se encuentra el colector del Río Verdiguel, no pueda drenar los moles de litros que se meten a los comercios de calles céntricas como Lerdo de Tejada, Mariano Rivapalacio y la misma Independencia… sí, ahí donde el tres veces moreno despacha como presidente municipal.
Aunado a los encharcamientos e inundaciones de casi la mitad de las calles de Toluca, súmele los miles de baches que deberá sortear antes de llegar a su destino. Lo menos que le puede pasar es una pinchadura de un neumático, pero ya son tan profundos los baches en la periferia de la capital mexiquense, que las llantas se pierden totalmente o terminan con una fractura de rin.
¿Y qué hace la autoridad?
Anuncia semana a semana que se bacheó en pueblos y colonias, pero las ruinas de lo que una vez fue Toluca la Bella, son cada vez más evidentes. Si alguna vez ha viajado a San Pedro Totoltepec, ahí donde se encuentra el fraccionamiento García Lovera, el pavimento ha desaparecido de la calle Vicente Lombardo Toledado, calle en la que circulan más de 10 mil autos, camiones y bici-motos diariamente.
Esa zona ha tenido que ser atendida por los propios ciudadanos, quienes han arrojado grava para poder transitar sin que sus unidades sufran desperfectos mayores.
Lo mismo pasa con las calles de San Cristóbal Huichochitlán, Fraccionamiento San Jorge, la colonia El Seminario, Paseo Vicente Guerrero, las laterales de Paseo Tollocan, la Nueva Oxtotitlán y como cereza del pastel, la zona industrial, idéntica a una zona minada.
Luego de un par de meses al frente del ayuntamiento, el alcalde Ricardo Moreno agradeció a todos los ciudadanos por sus contribuciones de agua, predial y alcantarillado y dijo que como nunca en la historia de Toluca, se había presentado una recaudación tan copiosa, sinónimo de la confianza de los toluqueños hacia su persona y su gobierno.
En serio don Ricardo Moreno… ¿no se le cae la cara de vergüenza cuando pasa por las calles de Toluca en mal estado (si es que las transita) y ve lo “guapa” que les está entregando luego de ocho meses de gestión? ¿no le da pena entregar obras con materiales de pésima calidad que luego de tres lluvias ya tienen hoyos por doquier? ¿dónde quedó esa tecnología de punta que utilizaba el caucho de las llantas para hacer un pavimiento que duraría mínimo 30 años? (esas fueron sus palabras)
La ciudad no resolverá sus problemas con estadísticas ni números alegres, quienes viven en Toluca tienen una percepción muy diferente, donde la inseguridad y los pésimos servicios públicos son la constante y así nadie puede creer en los galardones que reciben por sus políticas públicas y su “gobierno inteligente”.
Nadie puede imaginar que la publicación Alcaldes de México lo premió por haber colocado pasos peatonales “de primer mundo”, cuando el propio Ricardo Moreno reconoció que copió ese modelo en un viaje que hizo por el lejano oriente ¡¡¡hace 15 años!!! De ahí en fuera, no vemos que tan inteligente ha sido la administración.
Morena ya tuvo la oportunidad de gobernar con Juan Rodolfo Sánchez al frente y los ciudadanos lo castigaron en las urnas y lo colocaron como un pésimo alcalde… Don Ricardo, si intenta superar a quien fuera su jefe, va por buen camino, lo está superando con creces.
𝐋𝐀 𝐃𝐄𝐋 𝐄𝐒𝐓𝐑𝐈𝐁𝐎…
Quienes fueron sus aliados, siguen apaleando al Senador Enrique Vargas del Villar, quien, aunque lo niegue, va perdiendo terreno en el ánimo panista, por lo que todos sus afiles, apuntando a las dirigencias municipales han sufrido sendas derrotas, mientras que Roberto Anuar Azar Figueroa se fortalece.
Ahora fue en las elecciones de Toluca, donde la diputada local Ema Laura Villavicencio fue derrotada estrepitosamente luego de obtener sólo 150 votos de un total de mil 193 que fueron sufragados y en la que el ganador fue Mario Jorge García con poco más de 700 votos, el cual fue apoyado por el actual diputado local Anuar Azar Figueroa, entre otros panistas más.
Si Enrique Vargas no quiere ver que su imagen y peso político comienza a sufrir un lógico debilitamiento, hará muy la en dejar el Senado en el 2027 para tratar de ser, nuevamente, alcalde de Huixquilucan, donde seguramente morena será un rival de mucho cuidado en la persona de José Antonio García García.
Faltan dos años para que haya elecciones, pero en estos momentos la conformación de grupos de apoyo no están favoreciendo a Vargas del Villar.