Valle de Bravo México. En sesión de Cabildo, celebrado en la comunidad de Colorines, la alcaldesa Michelle Núñez Ponce recibió la negativa para aprobar diversas obras públicas, toda vez que no pudo convencer a varios de los regidores de partidos opositores y aliados por el pobre sustento jurídico y legal de las obras a ejecutarse.
No obstante, a través de sus cuentas oficiales, la presidenta municipal de Valle de Bravo culpó a los regidores del PVEM, PRI, PAN y PT del retraso en la ejecución de obras, destacando su voto en contra durante la sesión, por lo que se deberá volver a realizar el proceso y presentarse en la siguiente reunión de Cabildo.
Núñez Ponce escribió “hoy tuvimos sesión de Cabildo para aprobar importantes obras públicas que mejorarían la vida de miles de vallesanas y vallesanos. Agradezco profundamente el voto a favor de las y los regidores y la Síndico (sic) de Morena siempre comprometidos con el bienestar del pueblo”.
Más adelante, relató: “pero lamento que las regidoras del verde, PRI, PAN y el regidor del PT hayan decidido abstenerse… dicen tener dudas… y por eso, hoy mismo se reunirán con el director de Obras Públicas para aclararlas”.
La alcaldesa remató que espera sinceramente que la abstención haya sido por desconocimiento y no por algún otro interés que no tenga que ver con el bienestar del pueblo, señalando directamente a los regidores que se abstuvieron de votar sus propuestas de obra pública.
Cabe destacar que la alcalde de extracción morenista tuvo un altercado con los regidores de su primer administración, lo que derivó en la remoción de su cargo por la propia alcaldesa, lo que a la larga le costó una orden de un juez federal para que liquide las quincenas que dejaron de percibir quienes se desempeñaban como regidores, un síndico municipal y la que fuera presidenta municipal por Ministerio de Ley.

