El Estado de México cuenta con un registro de cinco mil 134 personas dedicadas a la alfarería, una de las técnicas artesanales más antiguas, cuyo legado ha sido transmitido de generación en generación entre las familias mexiquenses; para preservar esta actividad, la Secretaría de Cultura y Turismo apoya la comercialización de estas piezas mediante su exhibición y venta en las Tiendas de Artesanías Casart.
De los artesanos registrados ante el Instituto de Investigación y Fomento de las Artesanías (IIFAEM) dos mil 307 son mujeres y dos mil 827 hombres, dedicados a esta actividad.
Una de las técnicas utilizadas es el barro policromado, que presenta en el acabado o decoración una gran variedad de colores; el barro bruñido, barro vidriado y barro de pastillaje, donde destacan árboles de la vida, vajillas de cerámica en alta temperatura, cazuelas, jarros, ollas y floreros.
Entre los municipios productores destacan Acambay, Atlacomulco, Almoloya de Juárez, Calimaya, Ixtapan de la Sal, Metepec, Temascalcingo, Texcoco, Tenancingo, entre otros.