El diputado local de Morena, Isaac Montoya Márquez, en el marco del Día Internacional de la Juventud afirmó que desde la legislatura se debe garantizar recursos suficientes para las políticas en pro de la juventud “es una tarea en la que no podemos fallar, hay pendientes en el Estado de México, se necesita avocar un presupuesto para los más de 5.1 millones de jóvenes en la entidad, que en los últimos años se ha recortado en más de un 80%”.
En sesión de la Diputación Permanente, emitió un mensaje, justo en la conmemoración de las juventudes, destacó “es necesario que nos enfoquemos, porque esta generación es la que puede salvar, puede regenerar el tejido social, la vida pública de la entidad o de fallarles será la generación que también nos podrá condenar”.
Al dirigirse a los legisladores, afirmó que les corresponde mantenerse a la altura de las esperanzas y de esa energía creativa que emana de las juventudes mexiquenses, y devolver mediante un trabajo parlamentario cercano, siempre de la mano con la población, las garantías plenas, para el ejercicio efectivo de derechos para más de 5.1 millones de jóvenes en la entidad. Tenemos una responsabilidad muy grande ante los jóvenes de la entidad.
Refirió, que en su ámbito hay avances, como el dictamen a la iniciativa para reformar la ley que recientemente se aprobó en el seno de la Comisión de la Juventud y el Deporte, y mediante la cual se dan pasos importantes para combatir el adulto centrismo y garantizar recursos suficientes para las políticas en pro de la juventud.
Es muy importante reflexionar porque se ha resquebrado la relación en comunidad, porque nos hemos distanciado como vecinos, porque nos encontramos en una situación de desconfianza, porque se ha perdido la cercanía, el sentido de comunidad, agregó.
El morenista enfatizó, es por eso que las y los jóvenes no están dispuestos a tolerar, la hipocresía e indolencia de un poder que muchas veces se muestra distante y la juventud se aferra al anhelo de cambio.
El legislador señaló que ha habido generaciones enteras de juventudes que entregaron su vida, sus sueños, pensando en un mejor porvenir para toda la sociedad, estuvieron dispuestos a sacrificarse por el bien de todos. Basta recordar el movimiento del 68 y del 71, momentos históricos llenos de sangre.