Valle de Chalco, Méx. – 14 de mayo de 2022. Luego de 15 años de haber egresado de la Licenciatura en Enfermería, en 2015 Julio Flores Villegas regresó al Centro Universitario Valle de Chalco de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMéx) con la convicción de contribuir, mediante el ejercicio de la docencia y con base en la experiencia adquirida en su ejercicio profesional, principalmente en el extranjero, a la formación de profesionales en el área de la salud altamente capacitados y así, retribuir a la sociedad y a la casa de estudios que lo formó profesionalmente.
“Estuve en el extranjero alrededor de 10 años y regresar a mi Alma Mater había sido uno de mis grandes sueños. Quería compartir mi experiencia y, sobre todo, trasmitir a los alumnos y profesores, a todos mis compañeros, que tenemos posibilidades infinitas para superarnos”, sostuvo el universitario de 43 años.
Originario de la comunidad de San Miguel Tenextatiloyan del municipio de Zautla, en la Sierra Norte de Puebla, Julio migró en 1996 a Valle de Chalco, donde unos familiares lo hospedaron para que pudiera realizar estudios de nivel superior.
“Mis padres son indígenas nahuas y en mi pueblo no había posibilidades para continuar mis estudios universitarios. Hice el bachillerato en el municipio de Tlatlauquitepec, ubicado a dos horas de San Miguel. Tengo familia en Valle de Chalco y ello me permitió venir a estudiar acá. No tenía la expectativa de ingresar a la UAEMéx, puesto que no la conocía, pero si quería salir a buscar una oportunidad”, afirmó.
En agosto de 1996, Julio arribó al municipio mexiquense, que apenas tenía dos años de haberse creado y los tíos que lo hospedaron le comentaron que ya se gestionaba la apertura de “una universidad”, así que averiguó y realizó los trámites para continuar con su formación académica en la Unidad Académica Profesional Valle de Chalco, hoy Centro Universitario UAEM Valle de Chalco.
“Apliqué para estudiar Ingeniería en Computación, pero algo sucedió y terminé inscrito en la Licenciatura en Enfermería. A pesar de que no era lo que quería, mis familiares me aconsejaron que me quedara y posteriormente decidiera si quería continuar o no”, indicó.
Confesó que fue desalentador iniciar estudios en una carrera que no quería, sobre todo por las condiciones en las que inició el campus, pero también tenía claro que no quería regresar a Puebla, donde no tenía posibilidades de continuar estudiando.
Recordó que el Centro Universitario UAEM Valle de Chalco inició actividades académicas en las instalaciones de la Escuela Secundaria Técnica “Juan Rulfo” del mismo municipio, así que tenían que esperar a que salieran los estudiantes del turno matutino, a las 2:00 de la tarde, para iniciar sus clases.
“Nos prestaban algunos salones y a veces teníamos que trasladar las butacas para podernos sentar. No teníamos laboratorios. Había un salón que funcionaba como oficina administrativa y ahí teníamos algunos libros. Cuando inició la segunda generación se habilitó un espacio donde había dos maniquíes nada sofisticados con los que practicábamos”, detalló.