Por Luis Ayala Ramos
Amecameca, México. El gobierno de Amecameca implementó brigadas de vialidad, información turística, salud y seguridad para apoyar a los más de 30 mil visitantes que acudieron a venerar al Señor del Sacromonte en la tradición anual del «Miércoles de Ceniza» y cumplir con los protocolos establecidos en el semáforo epidemiológico color amarillo.
Por su parte las autoridades religiosas determinaron suspender por tercer año consecutivo el Carnaval y otros festejos alusivos a la fecha para evitar aglomeraciones y posibles contagios por Covid-19.
En ese sentido, el Ayuntamiento en apoyo al comercio que cada año se instalaba en las inmediaciones de la Iglesia de la Asunción fue ubicado a lo largo del camino Ayapango y los autobuses y vehículos que llegan de otros municipios mexiquenses o estados fueron ubicados en el libramiento.
De esta manera los fieles católicos podían caminar entre los diferentes puestos y consumir productos o adquirir artesanías sin hacer aglomeraciones como ocurría en la explanada y las inmediaciones de la iglesia de la Asunción o la capilla del Cerro del Sacromonte.
Para apoyar el trabajo de vialidad participaron elementos de Seguridad Pública y Protección Civil de Amecameca y de la Secretaría de Seguridad Estatal, lo que permitió dar fluidez en la cabecera municipal.
Representantes de la Iglesia informaron que la capilla del Sacromonte fue cerrada pero la imagen del Cristo permanece en la parroquia principal de la Asunción.
Los visitantes, que comúnmente llegan para la fiesta, sabían que este año no habría festejo alguno por lo que simplemente acudieron a la parroquia a visitar la imagen de su devoción, algunos se tomaron el tiempo para recorrer el centro de Amecameca, comer algo en familia y retirarse en completo orden.
Para ingresar a la parroquia solo fue necesario hacer fila donde les tomaban la temperatura y verificaban que trajeran cubrebocas, a lo largo de la fila, personal de las brigadas del Ayuntamiento supervisó que todo estuviera en orden.