El maíz es la base de la alimentación en nuestro país, además de ser bondadosa y multifacética, sus hojas despertaron la creatividad de las y los artesanos mexiquenses y, ahora, ofrecen productos a buen precio.
La creatividad y talento que emerge de los talleres artesanales creando piezas de ornato como tocados, muñecas, bailarinas, arreglos florales, bisutería, figuras religiosas y personajes populares.
Entre los municipios que destacan en trabajar con la fibra vegetal de maíz son Atlacomulco, Ecatepec, Ocoyoacac y Valle de Bravo.
La magia surge desde que las y los artesanos seleccionan su materia prima, principalmente en su tamaño de hoja y blancura para poderla limpiar y darle un tratamiento especial para que no se enlame.
Posteriormente, idealizan lo que quieren plasmar si es necesario de usar colores proceden a realizar el teñido con anilinas diluidas en agua. El proceso de creación depende mucho de la figura a realizar y el tamaño.
Parte de las herramientas que utilizan son tijeras, pegamentos y telas con encajes para sus creaciones, el tiempo de elaboración depende de la dificulta de la pieza además de un factor importante, que es la paciencia.