En caso de sismos, contar con un plan familiar de protección civil es imprescindible, ya que puede salvar vidas, prevenir accidentes y ser de gran utilidad durante las primeras 72 horas, periodo de tiempo que se considera crítico, destacó el titular del Departamento de Protección Universitaria de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM), Ruggiero Olivera Guadarrama.
En el marco de la Semana Institucional de Protección Civil, Olivera Guadarrama indicó que como parte de este plan familiar debe considerarse tener a la mano una mochila de emergencia que contenga lámparas, baterías, radio, agua embotellada y víveres enlatados para tres días.
También, un directorio impreso con números telefónicos y dirección de familiares y de emergencia, botiquín de primeros auxilios, medicamentos para quienes lleven algún tratamiento específico, kit de herramientas y documentos oficiales como credenciales, pasaportes y escrituras del inmueble escaneados y guardados en una memoria USB.
El plan de protección civil familiar está dividido en tres fases de reacción ante un sismo en casa; la primera etapa es de preparación a través de la cual se reconoce el espacio en el que se habita, como el tipo de cimientos, estructura y posibles zonas de riesgo, entre ellas ventanales o muebles que puedan causar algún daño. Deben identificarse las rutas de evacuación y definir un punto de encuentro seguro.
Asimismo, recomendó asignar responsabilidades a cada integrante de la familia para conocer qué hará cada quien al momento de un desastre natural, por ejemplo, el traslado de familiares que tengan dificultades en su movilidad, así como encargados de cerrar el gas y desconectar la fuente de electricidad.
Durante la fase del sismo, Olivera Guadarrama sugirió que los integrantes de la casa actúen con calma y se atengan al plan previsto. En la etapa post sismo o de recuperación, la recomendación antes de entrar al inmueble es realizar una inspección para detectar áreas con posibles dañadas en su estructura y que pongan en riesgo la vida de las personas.
“En 2017 terminó de temblar y hubo gente que quiso regresar al edificio y no se dio cuenta que había daños estructurales y a los minutos que ya había ingresado, el edificio se colapsó”, ejemplificó.
En caso de no contar con un Plan Familiar de Protección Civil recomendó tener a la mano zapatos de colocación rápida, una chamarra y celular con batería al salir de casa y dirigirse a un lugar que se considere seguro, es decir, lejos de bardas, ventanales o cables de alta tensión.
Si se encuentra en un edificio, a partir del tercer piso, la sugerencia es acudir a las zonas de seguridad internas del propio inmueble y replegarse.
El servidor universitario recomendó descargar la aplicación de la alerta sísmica en los celulares y en la medida de lo posible capacitarse en materia de protección civil y primeros auxilios, “aunque haya mucha tecnología es preferible estar capacitados y saber qué acciones tomar ante una situación de emergencia”, aseguró.
Luego de hacer un llamado a participar este 19 de septiembre al Segundo Simulacro Nacional que se llevará a cabo a las 11:30 horas, Olivera Guadarrama invitó a la comunidad universitaria y público en general a capacitarse de manera gratuita en la Dirección de Seguridad y Protección Universitaria, que pertenece a la secretaría de Rectoría de la UAEM.